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Renunció Juan Alberto Puiggari y Paraná tiene un nuevo obispo

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Se va Puiggari. El Papa León XIV nombró a un nuevo arzobispo para la Arquidiócesis de Paraná, que llegará pronto.

Su Santidad, el papa León XIV aceptó la renuncia de monseñor Juan Alberto Puiggari al gobierno pastoral de la arquidiócesis de Paraná y nombró arzobispo metropolitano de la misma circunscripción eclesiástica a monseñor Raúl Martín, de 67 años, hasta ahora, obispo de Santa Rosa.

Al mismo tiempo, se informa que monseñor Puiggari, será administrador apostólico hasta la toma de posesión canónica del nuevo arzobispo.

La noticia fue dada a conocer en forma simultánea, como es de práctica, en Roma y en Buenos Aires. Aquí lo hizo esta mañana a través de AICA el nuncio apostólico, monseñor Miroslaw Adamczyk.

Monseñor Raúl Martín

Nació en Buenos Aires el 9 de octubre de 1957; ordenado sacerdote el 17 de noviembre de 1990 en el estadio Luna Park de Buenos Aires por el entonces arzobispo de Buenos Aires, cardenal Antonio Quarracino.

Fue elegido obispo titular de Troina y auxiliar de Buenos Aires el 1 de marzo de 2006 por Benedicto XVI y consagrado obispo el 20 de mayo de 2006 en la catedral de Buenos Aires por el cardenal Jorge Mario Bergoglio SJ, arzobispo de Buenos Aires (coconsagrantes: Mons. Guillermo Rodríguez-Melgarejo, obispo de San Martín, y Mons. Jorge Eduardo Lozano, obispo de Gualeguaychú).

El 24 de septiembre de 2013, el papa Francisco lo nombró obispo de Santa Rosa; tomó posesión e inició su ministerio pastoral como el sexto obispo de Santa Rosa el 30 de noviembre de 2013.

En la Conferencia Episcopal Argentina es miembro del Consejo de Asuntos Económicos.

Es Profesor de Teología (por la Universidad Católica Argentina).

Arquidiócesis de Paraná

El 13 de junio de 1859 con la bula “Vel a primis” de Pío IX fue creada como diócesis y elevada a arquidiócesis el 20 de abril de 1934, por Pío XI.

Comprende, en la provincia de Entre Ríos los departamentos de Diamante, Feliciano, La Paz, Nogoyá, Paraná, Villaguay, y los distritos Achiras, Banderas y Sauce de Luna del Departamento Federal.

Según  el Anuario Pontificio posee una superficie de 30.348 kilómetros cuadrados, una población de 656.500 habitantes, de los cuales se estima que el 85% (558.025) son católicos. Para la atención espiritual de estos fieles la arquidiócesis cuenta con 52 parroquias, 116 sacerdotes diocesanos y 6 religiosos, 4 diáconos permanentes, 69 religiosas, y 133 centros educativos de la Iglesia.

Obispos y arzobispos

Su primer obispo fue Mons. José Gabriel Segura y Cubas (elegido el 21 de junio de 1859, fue obispo desde 1860 hasta 1862).

Segundo obispo fue Mons. José María Gelabert y Crespo (1865-1897).

Lo sucedió Mons. Rosendo de la Lastra y Gordillo, (1898-1909).

El cuarto obispo fue Mons. Abel Bazán y Bustos (1910-1926).

Quinto obispo de Paraná fue Mons. Julián Pedro Martínez (1927-1934).

Al ser elevada a Arquidiócesis, Mons. Zenobio Lorenzo Guilland, fue primer arzobispo (sexto diocesano) (1935-1962).

El segundo arzobispo de Paraná (y séptimo diocesano) fue Mons. Adolfo Servando Tortolo (1962-1983).

Tercer arzobispo de Paraná (y octavo diocesano) fue Mons. Estanislao Esteban Karlic (primero como arzobispo coadjutor con derecho a sucesión y administrador apostólico “sede plena” en 1983. Fue arzobispo de Paraná por sucesión desde 1986 a 2003).

El cuarto arzobispo (y noveno diocesano) fue Mons. Mario Luis Bautista Maulión (2003-2010).

El quinto arzobispo (y décimo diocesano) fue Mons. Juan Alberto Puiggari (2011-2025).

Mons. Raúl Martín, será el sexto arzobispo (undécimo diocesano) de Paraná.

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Temporada 2025 habilitada: El gobierno dio luz verde a la caza de nutria

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La Dirección de Recursos Naturales y Fiscalización de la Provincia emitió una Resolución que autoriza la temporada de caza comercial de la nutria en todo el territorio entrerriano. La medida fue publicada en el Boletín Oficial y busca regular el aprovechamiento de la especie.

La resolución establece el período de caza entre el 24 de junio y el 29 de septiembre de 2025, inclusive, con la excepción de las Áreas Naturales Protegidas. Esta decisión se fundamenta en “la necesidad de habilitar la temporada de Caza Comercial del Coipo o Nutria (Myocastor coypus), para el año 2025, en el territorio de la provincia de Entre Ríos”.

El organismo de aplicación lo faculta a “determinar anualmente el ámbito geográfico y temporal en que se habilitará la caza comercial de la nutria, en jurisdicción de la provincia de Entre Ríos”.

La resolución fue publicada en el Boletín Oficial Nº 28.133, según constató APF.

Además se destaca la participación de la Dirección de Recursos Naturales y Fiscalización en el Programa Nacional Nutria, que provee “información científica técnica actualizada, relacionada con el estatus poblacional de esta especie, garantizado así su aprovechamiento sustentable”.

Un informe técnico-científico del Área Técnica de la Dirección de Recursos Naturales y Fiscalización detalla varias razones para la habilitación. Entre ellas, se menciona que “la nutria tiene una respuesta bioecológica positiva (resiliencia ecológica), lo que garantiza una repoblación constante en el territorio, dada su alta tasa de natalidad (poliestría)”.

El informe también advierte que “la biología natural de la especie ubicada dentro de la taxonomía roedor, de no controlarse mediante la caza regulada, puede transformarse en un recurso dañino del entorno, de las producciones de economías regionales por el daño a terraplenes, invasión a plantaciones de nuez pecán, entre otros varios posibles daños”.

La Resolución autoriza “hasta 150 mil unidades de piel de nutria, como cupo máximo de captura para la presente temporada”. Para asegurar la sustentabilidad y el control de la actividad, se establece que “podrán ser objeto de caza, transporte, comercio e industrialización, las pieles de nutria a partir de la medida mínima de 70 centímetros de longitud, tomada desde el entrecejo hasta la base de la cola”.

La normativa también enfatiza el aspecto cultural y económico de la caza de coipo, señalando que “la caza de esta especie se practica cultural desde épocas remotas y continúa en la actualidad”, y que “la actividad de los nutrieros, es una actividad social y de sustento económico, por lo cual es viable integrar el aprovechamiento integral del recurso: piel y carne”.

Se busca además promover el uso de métodos de caza más modernos y ecológicos, como “rifle de aire comprimido para la caza activa y trampas ecológicas (trampa cepo con borde de silicona o caucho) para la caza pasiva”.

Finalmente, la resolución estipula que solo podrán cazar y comercializar la especie aquellos que se encuentren inscriptos en la Dirección de Recursos Naturales y Fiscalización, en cumplimiento con la Ley de Caza N° 4841.

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