La jueza Federal Sandra Arroyo Salgado envió a los hermanos Claudio Tortul y Marcelo Tortul a la cárcel por delitos contra el orden económico y coimas.

Se conoció que, después de ser indagados en el Juzgado Federal de San Isidro por delitos contra el orden económico, los hermanos paranaenses Claudio y Marcelo Tórtul serán derivados a una cárcel del Servicio Penitenciario Federal.

La investigación que comenzó a sustanciarse al respecto empieza a exhibir la base del éxito empresarial de muchos denominados y reconocidos empresarios de Paraná. Por los primeros pasos de la investigación que lleva adelante la jueza Federal Sandra Arroyo Salgado, aquel mote o aquella profesión o ejercicio de los negocios les queda grande porque la base de la fortuna siempre fue negociar con el Estado. Y por como la investigación lo estaría demostrando, siempre en condiciones que lo perjudicaban en detrimento de beneficios personales de los Tórtul y sus socios o cómplices.

La caída de los hermanos Tórtul no solo pone nervioso directivos de Enersa, sino también a funcionarios públicos de Entre Ríos que ocupan cargos importantísimos hace muchos años.

Sandra Arroyo Salgado, en el marco de la causa FSM 3084/2020, solicitó “a mayor brevedad posible y con carácter de muy urgente” al director del Servicio Penitenciario Federal, siete de los imputados sean enviados y alojados en un penal federal. La resolución precisa que los detenidos Christian Faria, Gabriel Di Cesare, Alejandro Castex, Alberto Alesci, Julio Terrado, Claudio Tórtul y Marcelo Tórtul “sean ingresados en la órbita de ese Servicio Penitenciario Federal y, en consecuencia, alojados en alguna unidad a su cargo a disposición exclusiva de este Tribunal”.

Aunque aún no trascendió a qué establecimiento carcelario serán trasladados, se cree que la primera opción es el penal de Ezeiza, que cuenta con un sector de alojamiento de presos VIP o empresarios del tenor de los Tórtul y demás implicados.

La investigación

Los hermanos Claudio y Marcelo Tórtul fueron allanados y detenidos en Paraná por una denuncia realizada por la empresa de seguridad privada Securitas, que admitió ante la Justicia el pago de millonarias coimas a representantes de organismos públicos para no perder los contratos y para cobrar servicios adeudados.

Los directivos de Enersa que designaron abogados defensores son tres: Marcelo Morales, gerente legal de la empresa de energía e hijo del ex procurador general Héctor Daniel Morales; el ex gerente general Juan Carlos Pimentel, hoy representante en el directorio por el Sindicato Luz y Fuerza; y el ingeniero Alejandro Cis.

A su vez por ahora la empresa de los Tórtul y Daniel Eduardo Carbonell, Tornell SA, sigue teniendo a cargo la seguridad de Enersa.

La defensa está a cargo de Juan Félix Marteau, la chueca para la comunidad del rugby del Paraná Rowing Club, del que Claudio Tortul es presidente. Marteau tiene un currículum envidiable. Entre otras cosas, figura como director del Centro sobre Seguridad Hemisférica, Terrorismo y Criminalidad Financiera de la UBA. El abogado oriundo de Paraná publica asiduamente interesantes artículos en los principales medios porteños.

Los allanamientos en la capital provincial apuntaron a un barrio privado, en otras viviendas de los Tórtul en calle Catamarca y Córdoba, como así también en oficinas de Enersa. En esta empresa se revisaron los contratos de 2016 a 2019 que tenía la firma de seguridad de los Tórtul, por supuestas facturas apócrifas presentadas y lavado de activos.

Los empresarios hace más de 20 años que vienen realizando negocios con el Estado entrerriano y tuvieron un importante crecimiento patrimonial. Muchos allegados a los Tórtul hace años que estaban sorprendidos por la requisa que tenían los dos hombres ligados a l a seguridad privada. “Pagan poco y ganan mucho”, repite un policía que trabajó algunos años en el área donde se habilitan a estas empresas que la función principal que cumplen es llamar a la policía.

UNO, Página Política y Análisis Digital